Se consideran niños pretérmino o prematuros aquéllos que nacen antes de las 37 ó 38 semanas de gestación.
En los países desarrollados siete de cada 100 niños nacen antes de término (el periodo normal de gestación) y uno de cada 100 pesa menos de 1.500 gramos.
El avance terapéutico y la actuación de equipos integrados por varios tipos de profesionales médicos han conseguido que estos niños nacidos demasiado pronto y demasiado pequeños puedan sobrevivir en la mayoría de los casos.
Cada año nacen en España unos 4.000 niños con un peso inferior a los 1.500 gramos.
Para los padres esta abrupta llegada resulta traumática, especialmente porque los bebés pasan enseguida a una unidad de vigilancia intensiva, donde permanecen en incubadoras con la asistencia necesaria para que maduren y alcancen un desarrollo lo más acorde a su edad.
Las expectativas de vida de estos pequeños se cifran en un 90 por ciento, un logro conseguido por la introducción de nuevos protocolos de tratamiento y seguimiento que engloban a distintos especialistas: neonatólogos, neumólogos, obstetras, radiólogos, oftalmólogos, otorrinos, neurólogos, epidemiólogos, psicólogos, enfermeros, trabajadores sociales.
|