Ideas para tener un bebé sano

Una vez que esté embarazada, comenzará con las visitas mensuales que aumentan a una vez por semana o más, al acercarse a su fecha de alumbramiento. En cada visita, el médico o la enfermera realizará una serie de exámenes y pruebas para determinar la salud de la madre y el bebé.

Obtener buena atención es muy importante, ya que se sabe que son mejores los resultados del embarazo en mujeres con el cuidado prenatal temprano. Éstos son algunos consejos sobre la forma de asegurarse de que usted está recibiendo el mejor cuidado posible:


1. Anote todas las inquietudes que usted pueda tener y llevarlos a sus citas con su médico para su aclaración. Las preguntas deben ser sobre los efectos secundarios de los tratamientos, los medicamentos, etc.

2. Al leer o escuchar algo nuevo en el ámbito de la obstetricia o embarazo es cuestionable con su médico.

3. Obtener Aclaraciones: Si su médico no le explica algo, o si usted está confundida acerca de algo, no tenga miedo de pedirle a su médico que le aclare todos los riesgos que implica en algunas intervenciones y responder a cualquier pregunta acerca de los posibles efectos secundarios de los medicamentos y pruebas.

4. Algunas mujeres tienen verguenza de revelar toda la información acerca de sus cirugías ginecológicas, de medicina general o de su historial clínico. Es de vital importancia que su médico lo sepa todo sobre usted, incluyendo cualquier droga (legal o ilegal, la prescripción o de venta libre) que usted pueda estar tomando o ha tomado en el pasado y enfermedades o procedimientos médicos que puede haber sufrido. Embarazos anteriores, abortos voluntarios e involuntarios, infecciones.

5. Seguir siempre las recomendaciones de su médico plenamente, así como sus instrucciones con respecto a los procedimientos médicos.

6. Toda la Verdad: Asegúrese de que su médico está enterado de cualquier efectos secundarios adversos a medicamentos o tratamientos o cualquier otro síntoma preocupante que haya experimentado.

Comer para dos

La buena nutrición es otro paso crucial para tener un bebé saludable. Una mujer embarazada necesita alrededor de 300 calorías al día para mantener el embarazo. La mujer ganará entre 25 y 35 libras en general. Esas calorías adicionales deben ser nutritivas. Una mujer embarazada necesita una dieta balanceada con proteínas, frutas, verduras y granos enteros, con un mínimo de azúcar y los alimentos grasos. La buena nutrición es muy importante, incluso antes de un embarazo.

Una dieta adecuada para mejorar sus probabilidades de tener un embarazo cómodo. Se reducirá al mínimo el efecto de la enfermedad y la indigestión por la mañana, mientras que, al mismo tiempo, ayudará a aliviar la fatiga, la constipación, las hemorroides y las infecciones asociadas con el embarazo.

Algunos nutrientes se han encontrado para proporcionar beneficios específicos para la madre o el niño. Por ejemplo, las vitaminas del grupo B son especialmente importantes. Uno de ellos, el ácido fólico, o su forma sintética, el ácido fólico, puede reducir el riesgo de defectos de nacimiento del cerebro y la médula espinal, llamado el tubo neural. Se recomienda que todas las mujeres deben tomar 400 microgramos de ácido fólico cada día. Los estudios sugieren que si todas las mujeres recibieran esa cantidad diariamente, la incidencia de defectos del tubo neural podría ser reducido en un 45 por ciento.

El ácido fólico se encuentran en muchos cereales para el desayuno fortificados, y en algunos suplementos vitamínicos.

El calcio y el hierro son también especialmente importante durante el embarazo ya que ayudará a evitar una nueva pérdida de la madre de su densidad ósea y el feto utiliza los minerales para el crecimiento óseo. Un suplemento diario de vitamina, aunque no un sustituto adecuado para una dieta sana, ayuda a colmar las lagunas en los días en la dieta de una mujer no sea completa.

Después de una dieta adecuada se asegurará de que usted aumente de peso a un ritmo constante y que siempre mantenga la ganancia dentro de los límites recomendados de 25 a 35 libras. Esto además de minimizar las posibilidades de desarrollo de las hemorroides, varices, estrías, dolor de espalda, la fatiga y la indigestión.

Evitar las infecciones

Muchas infecciones durante el embarazo puede ser peligroso para el feto. las infecciones del tracto urinario y las enfermedades de transmisión sexual deben ser tratados de inmediato. La carne cruda puede contener el parásito Toxoplasma gondii, que puede causar la infección por toxoplasmosis.

Las intoxicaciones alimentarias pueden causar meningitis, la neumonía o incluso la muerte al feto.

Evite compartir utensilios o tazas con otras personas, y esto debería reducir su riesgo de infección.

Relax

A veces es mejor dar un paso atrás y romper con el estrés en su vida. La dirección de una frenética y estresante vida durante su embarazo puede empeorar algunos de los efectos secundarios del embarazo, como la fatiga, dolor de cabeza, dolor de espalda y la indigestión. No tenga miedo de pedir ayuda en la casa. Tome más descansos de las cosas realmente estresante en su vida y la práctica de técnicas de relajación para obtener algún alivio de la molienda de la vida cotidiana.

Las fumadoras ponen a sus bebés en un riesgo significativamente mayor de tener un parto prematuro, de presentar bajo peso el bebé al nacer, o muerte en comparación con las no fumadores. Después del nacimiento, los bebés de madres que fumaron durante el embarazo tienen más probabilidades de tener mal desarrollo pulmonar, asma e infecciones respiratorias y de llegar a sufri el síndrome de muerte súbita infantil. Si una mujer deja de fumar al principio del embarazo, sin embargo, todavía puede mejorar sus posibilidades de tener un bebé saludable.

El alcohol también puede dañar al feto en desarrollo. El alcohol viaja rápidamente a la circulación sanguínea, de modo que cuando una futura madre bebe, su bebé también está bebiendo. El alcohol es conocido por causar retraso mental y anomalías faciales de los bebés, una enfermedad llamada síndrome de alcohol fetal. Nadie sabe qué cantidad de alcohol es seguro durante el embarazo, por lo que se recomienda que las mujeres eviten el alcohol por completo.

Tomando Medicamentos

Muchos medicamentos son apropiados durante el embarazo, si es realmente necesario. Pero una mujer embarazada no debe tomar ningún medicamento, incluso de venta libre, a menos que lo recete su médico. Si es posible, se debe evitar el consumo de drogas en el primer trimestre o tomar más de un medicamento a la vez. Ella también puede pedir la dosis más baja posible para tratar su condición.

Una mujer embarazada no debe ser privada de su terapia de drogas que realmente necesita, y las mujeres con pre-existentes condiciones médicas tales como la epilepsia, lupus, asma o presión arterial alta no deben dejar éstas drogas a causa de su embarazo.

Ejercicio

Hay cada vez más pruebas médicas para demostrar que el ejercicio, incluso una vigorosa sesión de ejercicios, es saludable durante el embarazo. Se ha encontrado que el ejercicio es por lo general seguro durante el embarazo, y que las mujeres que ejercen vigorosamente tenían más probabilidades de llevar a sus bebés a término en comparación con las mujeres que ejercen menos o nada, sin embargo, una mujer embarazada debe consultar con su médico antes de Ejercicio.

Caminar, nadar, andar en bicicleta son excelentes opciones para el ejercicio de una mujer embarazada. Muchas mujeres disfrutan haciendo yoga y Pilates prenatal. Algunos prefieren la comodidad de hacerlo desde la comodidad de su casa junto a un vídeo. Estar en buena salud general mejorará sus posibilidades de tener un embarazo cómodo.